My Photo
Name:
Location: Hermosillo, Mexico

Life insists on imposing itself like a bad house guest. I still look for meaning when most people around me are just trying to find the breaks. I'm attempting both and laughing so I don't cry. No one reads this sh*t.

Wednesday, February 01, 2023

The winter of our discontent

 La vida va en ciclos. El orden supone repeticiones, cambios predecibles alrededor de los cuales podemos planear. Ahora todo está tan sistematizado que podemos predecir y planear días completos con el fin de protegernos de las inclemencias de la naturaleza. Se supone que si estudiamos nuestros biorritmos podemos predecir nuestra predisposición a ciertos humores en determinados días. Ojalá fuera cierto.

Cuando alguien con quien paso mucho tiempo a diario me cuestiona que la mitad de las canciones que programo en mi celular son de las más tristes que existen, me da por decir que quiero pintar con todos los colores de mi caja. Si se me entregó al nacer una caja con más de 100 tonos de emociones, yo puedo transponer eso a la sensación de abrir por primera vez una caja de 64 crayolas y ver todos los diferentes colores. Siempre era un ejercicio el elegir los más bonitos para que fueran los primeros de los que haríamos swatches en la última hoja del cuaderno. Pero luego el ejercicio era el contrario, elegir los más feos y hacer algunos trazos arrugando la nariz y riendo, haciendo algún sonido de desagrado. Pero siempre habría motivo para usar esos colores desafortunados en algún dibujo. Si eramos perspicaces con el tiempo nos dábamos cuenta que el contraste que aportaban estos colores a nuestros favoritos era apreciable y deseable. Yo quiero usar todos los colores de la caja, y aprender a abrillantar los bonitos con el contraste de los feos.

Ciclos, contrastes. Y luego está el avance, la evolución. El cambio, lo único tan cierto como la muerte. Vamos a cambiar o la vida nos va a cambiar, pero nadie puede permanecer estático. Tendemos al movimiento y no a la inercia. Y en esos ciclos y contrastes y cambios de repente un día nos despertamos y nos damos cuenta que ya estamos en proceso de duelo por lo que creíamos inamovible. Porque no podemos predecir el cambio propio, mucho menos el de otros, ni el de la dinámica que queremos manejar.

Pero si algo hay más triste que este ultraje de la incompasiva naturaleza humana, es encontrar en los escombros y ruinas de lo que creíamos, el objeto intacto de lo que pensábamos haber dejado atrás. Al quitarle el polvo le vemos perfectamente todos los matices decorativos, los contrastes de antaño, la delicada filigrana de los silencios que se quedaron más grabados que las palabras. Y es algo que solamente uno mismo puede apreciar. Nadie más lo va a entender, así que lo guardamos bajo la gabardina pesada de la memoria, sin atrevernos a echarle llave en el olvido.

0 Comments:

Post a Comment

<< Home