Nay! I say

Creo que deberia estar haciendo algo de provecho...

Digo, si ya logre salirme con la mia (cuando no) y consegui el medio turno... minimo deberia estar leyendo lo que me falta para completar el primer capitulo de mi tesis... o el borrador del primer capitulo de mi tesis... o al menos las inches notas. Pero nel, lo que voy a hacer es bloggear y hacerme autopiojito y probablemente tomarme una siesta. Go, me!

Este es simple y sencillamente uno de esos dias. Uno de esos dias en los que parece que algun webon se tropezo con el cable de corriente de tu cerebro y no tuvo la delicadeza de volverlo a conectar. Lo que quiero es que ya todo me quede claro. O al menos si no me va a quedar claro, que no me importe.

And now for something completely different

Ya descrubri el porque de mi limitada gama de estilos... siempre me habia preguntado si realmente por motivos profundamente ocultos en mi subconciente regresaba siempre de las compras con mas y mas ropa del mismo corte informal, mas bien chamaquesco. En serio que nunca me daba cuenta, pero siempre que iba de compras terminaba con mas sudaderas, camisetas sin complicaciones, jeans y cosas por el estilo. Pero no es cuestion de atacar a mi mente ni a mi subconciete sino a mi completa webonez... la mente maestra de mi estilo ha sido identificada...

Son mis pies.

Mis pies tienen la culpa de que tenga mas camisetitas que botones en total en todas las blusas de botones que poseo. Tambien tienen la culpa de que no posea ni una mugre falda, un solo vestido, y un vomitadero de jeans de todo color y tipo. Mis pies; flacos, planos y completamente malcriados, solo aceptan someterse a tenis skechers, sandalias y zapatos de piso o plataforma. Nada que contega tacon les causa otra cosa que no sea risa despreciativa o pura, inadulterada rabia cuando se les trata de imponer. Soportaran un rato algo que no contenga algun tipo de acojinamiento suave en la suela pero al tiempo terminaran tambien lanzando truenos al sistema nervioso central. Donde alguien mas ve un zapatito precioso con un pequeño tacon, los dedos de mis pies ven un tobogan al infierno. Y esta apretado el infierno.

Luego es una risa ver los berrinches que se avientan cuando se les quiere imponer a la fuerza algun maligno tacon... se sacuden incontrolablemente, van y vienen, se agitan, chocan y terminan descontrolando al cuerpo completo, haciendolo ver, a menos que el lugar este muy abarrotado, oscuro, o sobretomado por el alcohol, de la cintura para abajo como una marioneta manejada por un niño de cuatro años con tres pixie sticks y dos platos de fruti lupis en el estomago.

Al final siempre ganan, es como querer jugarle a las vencidas a un cuadraplegico, asi que ahora ya ni me molesto en buscar ropa que tenga a duras fuerzas que ser portada con algun tipo de especimen taconifero... aparte realmente a base de no ser forzado, mi pie ha adquirido una forma y textura bastante agradables, cosa que no es para despreciarse. Asi que, estando solucionado el misterio, me desembarazo de la preocupacion. A menos que las plataformas pasen de moda.