Boy meets girl

O sea que la chica, siendo quien era, realmente no tenia intencion de ser emparejada con ninguno de los varones del coro. Hubiese preferido bailar sola. Pero emparejada estaba, y no muy contenta al respecto. A la hora de la hora, por cuestiones de estetica y estaturas, le cambian la pareja. Ahora esta con un muchacho mas alto, con el morenito que siempre esta parado atras con los tenores. Si, es uno de los tenores primeros, aunque ella es soprano segunda. Bueno. Distancia, que ni te conozco aun...

Ensayar la entrada de vuelta, todos con las parejas, de repente el, sin darse cuenta, o sin tomar en cuenta la reserva y la timidez revuelta con sangronez de la chica, le ofrece el brazo para que salgan juntos a escena, como pareja. Es la primera vez que ella se da cuenta que este muchacho no le tiene miedo a sus barreras. Desconcierto.

Luego concierto. Ella no baila, lo deja bailar a el un poco porque ella a duras penas puede mantenerse en pie, siendo la primera vez que pisa un escenario de ese tamaño para cantar. Parece entender. Es reconfortante...

Por meses, no se dice mas. No mas de lo necesario, no mas de lo usual para miembros de un coro que de repente se ven en reuniones y demas. Pasan entre medio algunos meses y un resbalo emocional que afortunadamente no lleva a mas. Luego empiezan a salir, primero con amigas, con los demas miembros del coro, siempre acompañados, con una candidez rayando en soberano despiste la mente de ella desliza y desecha todos los comentarios de las amigas con respecto a lo que podria llegar a ser entre ellos.

Esto ya habia pasado antes, que no? Quiero o no quiero? que quiero? Hay alguien pero no se que hay mas alla de la persona, de lo que se puede observar a simple vista. No hay llamas, hay un resplandor. Al parecer un diamante ha logrado reflejar un rayo de sol, o algo por el estilo, es una de esas cosas que muy facilmente podriamos pasar por alto. Yo lo pude haber dejado pasar por alto.

Pero el no lo permitio. Esa noche el pollo del VIPs estaba desabrido pero el converso con una franqueza y una sinceridad que ella jamas habia conocido en una persona. O tal vez si, solamente que ya no lo estaba viendo igual, el ya no era cualquier otra persona.

Aun asi, despues del encuentro en aquella noche helaaaada de febrero, del encuentro de las intenciones y de los sentimientos, ella lo haria pasar por aros de fuego, pero el, impavido, hizo todo con aplomo, sin flaquear y sin perder el estilo. No quedo mucho lugar para dudas despues de eso.

Hoy dia, ella lo ama. Y sabe que el la ama tambien.